Iglesia de Dios Fuente de Vida

La Gran Comisión es nuestro mandato.


Santidad Práctica (Hebreos 13:1-7)


Introducción: El camino de la fe cristiana incluye la perseverancia en la santidad por parte del creyente; fallar en esta perseverancia trae consecuencias fatales y definitivas. La Epístola de los Hebreos ha expresado solemnemente esta máxima advertencia.

1. El Amor Hacia Los Hermanos (Hebreos 13:1) Este es un buen punto de partida para la práctica de la vida cristiana, permanezca el amor fraternal. Este término amor fraternal (“Philadelphia”, en griego) fue escogido por William Penn para expresar el principio fundamental de su colonia, y llegó a ser el nombre de la cuarta ciudad en importancia de Los Estados Unidos. Esta es la expresión social de ágape, la buena comunión y feliz armonía consistente que Dios ha puesto en sus corazones (Romanos 12:10; 1 Tesalonicenses 4:9; 1 Pedro 1:22). Este amor debe permanecer y debemos cultivarlo. Debemos descubrir maneras y condiciones para que se dé ese amor de hermanos. De alguna forma debe ser una realidad en la vida de los creyentes en la congregación (Iglesia).

2. Bondad Hacia El Extranjero (Hebreos 13:2)

Muy bien combinados están estos versículos con la palabra “Philia”, que significa amor con hermanos. Aquí se combina con la palabra griega “zenos”, que quiere decir extranjero. El amor fraternal no nos debe impedir a ser hospitalarios con los extranjeros. Por ser hospitalario con los extranjeros, sin saberlo, algunos hospedaron ángeles (Génesis 18:19). Debemos tener cuidado al tratar con desconocidos. Procuremos no ponernos en peligro ni poner en riesgo a nuestra familia; no todas las personas tienen buenas intenciones. Sin embargo, seamos amables y ayudemos al extranjero. Esa ayuda debe ir más allá de la oferta de oración.

3. Compasión Hacia Los Que Sufren (Hebreos 13:3)

“Acordaos de los presos”. Como si nosotros mismos compartimos sus cadenas. No puede haber verdadera empatía si solamente derramamos lágrimas por ellos en el altar. Debemos ir a verlos, llevarles y ropa para vestir. Debemos entrar en los sufrimientos de los demás, orando, escribiendo, visitando y ayudándoles en lo que podamos. Como compasivos, hagámonos hermanos de todos los que sufren. Es lo que manda el Señor.

4. Buen Ministerio En El Matrimonio (Hebreos 13:4)

“Honroso sea en todos el matrimonio”. El consejo aquí es para el esposo y la esposa, para que su matrimonio no esté mancillado por la infidelidad. Definitivamente, no podemos agradar a Dios sin observar estrictamente una norma cabalmente cristiana de pureza sexual y fidelidad conyugal.

5. Independencia En Cuanto Al Dinero (Hebreos 13:5-6)

“Sean vuestras costumbres sin avaricia”. Esto quiere decir literalmente que no tengamos amor al dinero (igual que 1 Timoteo 3:3). Anteriormente hemos estado diciendo que en la santidad el amor en primer lugar es a Dios. El problema con la avaricia es que desplaza a Dios del corazón por poner el dinero. Por eso fue que Jesús recomendó “guardaos de toda avaricia” (Lucas 12:15). La avaricia es un deseo exagerado hacia las riquezas.

6. Recordar A Los Dirigentes o Líderes (Hebreos 13:7)

La iglesia necesita siempre estudiar las vidas y enseñanzas de los líderes del pasado para poderlos seguir.

Conclusión: Santidad es amor puro que expulsa al pecado y gobierna el corazón y la vida. Santidad es parecerse a Cristo. Santidad es la presencia de Dios en el creyente. Es un estilo de vida permanente que agrada a Dios.

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